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Convocatoria Testimonios Oración
El día 4 comenzó el Mes de Nazaret en Tarrés, habiendo llegado todos bien: Donald, desde el Reino Unido, acogido en Barcelona por Josep, responsable de la Comunitat de Jesús; Manolo y Juan, acogidos por Joan, de la Comunitat; Antonio y Aquilino, desde Alcañiz y Paterna; y Ángel, buen conductor, que con Andrés y los Fernandos chilenos llegaron desde Madrid, con parada en Zaragoza. Forman una fraternidad muy bien avenida. Con Jesús en medio, qué maravilla de gente.
07-08-2012: Los hermanos en el Mes de Nazaret nos envían esta foto. "Con ellos y por ellos", como el título del último boletín, nos unimos ante Jesús, participamos de su gozo de vida de fraternidad. Todos se encuentran bien y están felices por hallarse los unos a los otros en sus vidas, en su momento real, en su alegría de seguidores de Jesús.
13-08-2012: El Mes de Nazaret sigue su curso en las vidas de nuestros nueve hermanos: un Nazaret en un entorno de piedra, el pueblo leridano de Tarrés, en la casa de la Cominitat de Jesús, donde el hermano Carlos anda por la cocina, la capilla y sube y baja escaleras. La noche del jueves, 9 de agosto, fue dedicada a la adoración y el sábado, 11, día de desierto: soledad, silencio, escucha. El domingo, 12, día de descanso con visitas al Monasterio de Poblet y Montblanc.
Manolo, Donald, Andrés, Fernando TAPIA, Fernando VARAS, Juan, Antonio, Ángel y Aquilino están viviendo un momento importante en sus vidas y el regalo de la presencia del Señor en el pan de vida, el que da la vida al mundo, adorado y compartido en los quehaceres del día, y en la gente, presencia de Jesús encarnado en el ser humano.
Los textos de Michel LAFONT dan pie al trabajo de cada día y al encuentro de fraternidad. Manolo coordina con su gran espíritu de hermano y servidor.
16-08-2012: El Mes de Nazaret entra ya en su última etapa y finalizará con el retiro de la fraternidad sacerdotal española en las Javerianas de Galapagar. Nuestros hermanos están teniendo una profunda experiencia de fraternidad, en el encuentro con el Señor y en la amistad basada en escucharse mutuamente y contemplar la vida con los ojos de Jesús. La amistad con el Nazareno, el compañero en la fatiga, la risa, el fracaso, la curación y la mesa compartida, -como el hermano Carlos era amigo del Maestro-, es una riqueza que les está haciendo hombres nuevos y más hermanos.
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