Carlos de Foucauld
HERMANO DE TODOS - BENI ABBES ( 1901 - 1904)
Para hacerse cercano a los más "alejados", Carlos piensa establecerse en Marruecos, pero ante la imposibilidad de hacerlo se establece en Beni-Abbès, al sur de Argelia, cerca de la frontera marroquí.
Quiere ser un Evangelio vivo ...
Allí, su vocación de "vida de Nazaret" se matiza con el misterio de la Visitación: una vida oculta, laboriosa y pobre, con largas horas de adoración ante la Eucaristía cuya presencia irradiante desea llevar a todos. Quiere ser un Evangelio vivo, gritarlo por su vida, proclamar la bondad de Dios por su manera de relacionarse con los demás.
Llaman a su casa "la fraternidad"
A lo largo del día, va acogiendo a pobres, a enfermos, y a soldados franceses, sin distinción de raza o religión. La gente empieza a llamar a su casa la "fraternidad" y eso le gusta, pues su vocación es la de un "hermano universal".
Frente a las injusticias y la esclavitud
Hombre de su tiempo, Carlos no se cuestiona sobre la legitimidad de la colonización, pero reacciona frente a las injusticias, en particular la de la esclavitud, que permite hipócritamente el gobierno francés. Alerta a sus amigos y a las autoridades sobre este tema, escribiendo que no podemos ser "perros mudos". Él mismo rescata a unos esclavos.
Descubriendo otra forma de vida contemplativa
Para mantener su vida contemplativa, Carlos se impone normas monásticas, que no podrá seguir, pues la realidad y el Espíritu le empuja más allá ... y así poco a poco, irá descubriendo otra forma de vida contemplativa.
Espera también a compañeros así que sigue escribiendo Reglas que van evolucionando junto con sus intuiciones: en Beni Abbès, la regla de los ermitaños del Sagrado Corazón se convierte en la de los Hermanitos del Sagrado Corazón: ya no quiere ser ermitaño sino hermano.