Carlos de Foucauld
VIAJERO Y EXPLORADOR (1882-1886)
Exploración de Marruecos
Carlos deja el ejército, y se traslada a Argel para preparar un viaje de exploración a Marruecos. Para su preparación estudiará árabe y hebreo.
En aquel entonces ningún europeo se atrevía a entrar en Marruecos, así que, para pasar desapercibido, se disfraza de judío. Un rabino judío lo acompaña, y es así como recorrerá casi 3000 km en 11 meses, en su mayor parte por terreno desconocido, describiendo numerosos lugares con precisión.
Nueva mirada sobre judíos y musulmanes
En el camino, experimenta no sólo la dureza de la pobreza y el desprecio social, sino también el carácter sagrado de la acogida: en dos ocasiones sus anfitriones le salvan la vida. Participa en la vida de la comunidad judía y se queda admirado con la oración de los musulmanes.
Una gloria que no le interesa tanto
A su regreso en París, la Sociedad Francesa de Geografía le galardona con un Premio. El relato de sus viajes y los datos recogidos se publican en su obra " Viaje a Marruecos (1883-1884) ". Es un momento de gloria y reconocimiento; pero esta gloria no parece interesarle.
Muy impactado por su experiencia
En este momento comienza un cambio muy importante de su vida. La experiencia tan dura de esos once meses, el contacto con la soledad del desierto, la acogida de los judíos y la fe de los musulmanes lo han impactado y le hacen pensar.
“El Islam ha provocado en mí un cambio profundo… El contacto con esta fe, con estas almas viviendo continuamente en presencia de Dios, me ha hecho entrever algo mucho más grande y más verdadero que las ocupaciones mundanas. Me puse, pues, a estudiar el Islam y a continuación la Biblia” (Carta a Henri de Castries, 8 julio 1901)